La orquídea, un símbolo patrio al cuidado de Unibagué
- Comunicación Institucional
Campus Unibagué, resguardo de las orquídeas (Cattleya trianae).
La orquídea, Cattleya trianae, flor nacional de Colombia, está en peligro de extinción; sin embargo, el campus Unibagué es el lugar con mayor número de ellas en condición de protección en el país. Por su escasez ha sido agregada a los libros Cites y es trabajo de la nación su cuidado y supervivencia, labor que desempeña esta Universidad a la altura, con lo que colabora a la prolongación de nuestro patrimonio ambiental.
“Aquí, por donde quieras mirar, las ves: están adheridas casi a todos los árboles. Es una situación extraña, pero, ante todo, hermosa”, señaló el docente investigador Carlos Eduardo Beltrán, de la Facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas y miembro del grupo de investigación Naturatu.
Celebramos tener en el campus la más exótica de nuestras flores, prueba reina de nuestra riqueza floral: la misma que utilizó José María Triana Algarra en el siglo XVIII, quien, en condición de cónsul en París, con espíritu nacionalista, descrestó a Napoleón III y la emperatriz Eugenia de Montijo, con la rareza y belleza de nuestras orquídeas.
La especie Cattleya trianae continúa siendo un tesoro, por su belleza exótica y la dificultad para hallarla, lo que la reviste de un valor comercial bastante alto.
“De 30 mil semillas plantadas solo tres se desarrollan y para que su flor brote, pasan cerca de siete años. Esta especie es endémica del Tolima, solo se halla en 10 de sus 47 municipios, datos que hemos sistematizado en el grupo Naturatu”, agregó Beltrán.
Cortolima y la Policía Nacional ven en el campus de Unibagué un lugar mágico, donde las orquídeas afloran y se prolongan. Las flores que se incautan en comercializaciones ilegales llegan a este lugar, donde el Estado colombiano las ve seguras.
Las orquídeas han logrado fortalecer la pasión y la entrega científica de hombres y mujeres del grupo de investigación Naturatu, quienes se han convertido en continuos caminantes, exploradores y protectores de un emblema nacional de la República. Nuestro campus cuenta con un espacio florido y con una reserva natural de 0,3 hectáreas, que protege organismos que la urbanidad hostiga.